martes, agosto 10, 2010

Malos espíritus

Hoy escuché un programa sobre salud mental en la India. El principal problema es que únicamente hay UN psiquiatra por cada 400 mil personas, por lo que tiene una de las coberturas más bajas en todo el mundo -habría que ver cuál es la tasa en América Latina-.

Para tratar sus trastornos mentales -como adicción, depresión o psicosis-, la población de la India acude a los templos en busca de ayuda divina. Uno de ellos está en el sur y se llama Hanumanthapuram, donde se supone que una encarnación de Shiva sana a los enfermos mentales, expulsando a los "malos espíritus".

Las enfermedades mentales también se conciben como resultado de "magia maligna" (o brujería, como le llamaríamos en Latinoamérica). Es decir, que para ellos son el resultado de algo externo al individuo. El resultado de una batalla entre el Bien y el Mal, para usar nuestras categorías dualistas y maniqueístas.

Uno pensará que estas religiones Orientales están muy "atrasadas" pero si revisamos la tradición Cristiana Occidental también encontraremos vestigios de esas mismas creencias. Recuerden varios pasajes del Evangelio donde Jesús es presentado como exorcista. San Marcos nos ilustra:

Cap. 1
21 Entraron en Cafarnaúm, y cuando llegó el sábado, Jesús fue a la sinagoga y comenzó a enseñar.
22 Todos estaban asombrados de su enseñanza, porque les enseñaba como quien tiene autoridad y no como los escribas.
23 Y había en la sinagoga un hombre poseído de un espíritu impuro, que comenzó a gritar;
24 «¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido para acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios».
25 Pero Jesús lo increpó, diciendo: «Cállate y sal de este hombre».
26 El espíritu impuro lo sacudió violentamente, y dando un alarido, salió de ese hombre.
27 Todos quedaron asombrados y se preguntaban unos a otros: «¿Qué es esto? ¡Enseña de una manera nueva, llena de autoridad; da órdenes a los espíritus impuros, y estos le obedecen!».

Cap. 5
1 Llegaron a la otra orilla del mar, a la región de los gerasenos.
2 Apenas Jesús desembarcó, le salió al encuentro desde el cementerio un hombre poseído por un espíritu impuro.
3 El habitaba en los sepulcros, y nadie podía sujetarlo, ni siquiera con cadenas.
4 Muchas veces lo habían atado con grillos y cadenas pero el había roto las cadenas y destrozado los grillos, y nadie podía dominarlo.
5 Día y noche, vagaba entre los sepulcros y por la montaña, dando alaridos e hiriéndose con piedras.
6 Al ver de lejos a Jesús, vino corriendo a postrarse ante él,
7 gritando con fuerza: «¿Qué quieres de mí, Jesús, Hijo de Dios, el Altísimo? ¡Te conjuro por Dios, no me atormentes!».
8 Porque Jesús le había dicho: «¡Sal de este hombre, espíritu impuro!».
9 Después le preguntó: «¿Cuál es tu nombre?». El respondió: «Mi nombre es Legión, porque somos muchos».
10 Y le rogaba con insistencia que no lo expulsara de aquella región.
11 Había allí una gran piara de cerdos que estaba paciendo en la montaña.
12 Los espíritus impuros suplicaron a Jesús: «Envíanos a los cerdos, para que entremos en ellos».
13 El se lo permitió. Entonces los espíritus impuros salieron de aquel hombre, entraron en los cerdos, y desde lo alto del acantilado, toda la piara –unos dos mil animales– se precipitó al mar y se ahogó.

¿Qué opinan de esta concepción sobre el problema y su supuesta solución? Luego les daré mi opinión. Según estás religiones, no deberíamos de buscar médico-psiquiatra sino un exorcista (o médico de almas)...!?

2 comentarios:

Fabyhola dijo...

Hola, respecto de lo que comentas, me gustaria ver cómo continúa tu columna, pero debo comentar sobre lo expuesto, que tengo una apreciación en formacion al respecto, estudie cuatro años teologia, con el propósito de ser misionera cristiana, ahora luego de casi diez años, me diagnostican con esta enfermedad, y estoy procesando lo que me ocurre dia a dia, y analizando como mis crisis, me han llevado de decision en decision, hoy con una vida diferente a la que soñé, pienso que Dios conoce esta enfermedad, y no creo estar poseída, te recomiendo contrastar con un pasaje de Santiago y otrosm mira: Santiago 1:8
El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.
Santiago 1:7-9 (en Contexto) Santiago 1 (Todo el Capitulo)
Santiago 4:8
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
Santiago 4:7-9 (en Contexto) Santiago 4 (Todo el Capitulo)
Isaías 1:15-17 (Reina-Valera 1960)

15 Cuando extendáis vuestras manos, yo esconderé de vosotros mis ojos; asimismo cuando multipliquéis la oración, yo no oiré; llenas están de sangre vuestras manos.

16 Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo;

17 aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda.

Bueno te dejo, y me parece muy interesante leer tus comentarios.
SAludos.
Fabiola Sandoval.-

Anónimo dijo...

Hola Fabyhola!

Gracias por tu comentario. Si, ya habia comentado algo sobre ese pasaje de Santiago. Verlo aqui:

http://maniacodepresivos.blogspot.com/2009/05/biblia-y-trastorno-bipolar.html

Yo tambien estudie teologia, durante 3 años. Es mas, tengo una hipotesis sobre el contenido religioso de las "crisis" que tenemos. Luego la compartire.

Saludos, C.